Después de unos cuantos años abandonando los colores neutros para teñir nuestros ojos de marrones intensos, negros, todo tipo de dorados e incluso sombras de lo más estridentes, llega (como siempre) la tendencia opuesta, el contrapunto y por supuesto el color de ojos de los 60, el blanco!
Hay muchas formas de darle vida a esta tendencia, personalmente prefiero las más discretas, las que dan frescura al ojo y lo agrandan combinado con un buen tono de labios intenso, a las que te hacen parecer del futuro, pero bueno, para gustos colores!
Otra opción también válida es optar por los tonos pasteles, por ejemplo, rosa pálido en los labios y en el párpado móvil y raya blanca difuminada combinado por supuesto con una buena capa de máscara de pestañas, te dará una imagen de frescura que sobre todo de día estos meses tan raros agradecerás mucho!
Para las que de discretas tienen poco y les gusta que sus ojos brillen tanto como ellas, utilizar el blanco combinado con otros tonos más fuertes como terracotas cuando hace más frío o flúor en las noches que aún nos quedan de calor es una gran opción!
El truco está en aplicarlo con mayor intensidad en las zonas donde se debe iluminar la mirada: el lagrimal y el hueso de la ceja.
Por supuesto siempre se puede dar el toque chic a la mirada con eyeliner blanco justo encima de las pestañas, pero recuerda, combinar raya blanca con negra no es una buena idea... no eres un dálmata.
Otra cosa muy distinta sería utilizar diferentes tonos de blanco, que pueden ir desde los tonos camel hasta los plateados (no juntos, claro) con los que ya podríamos optar a un maquillaje mucho más elaborado y completo como el de la imagen, siempre procurando no parecer un cuadro de Picasso claro!
Espero que os haya gustado!
xxx
Imágenes a través de vogue.es
Que chulooo! nunca pienso en blanco al maquillarme y la verdad que da juego!
ResponderEliminarmuchas gracias! sí sobre todo para le gente que no está acostumbrada a verse muy maquillada esta opción puede ser muy interesante..
Eliminarun beso!